La Vie en Rose

No sabes cuándo ni cómo lo decidiste, pero parece ser que lo tienes decidido:

No es que rechaces al amor, pero vas a dejar de buscarlo por un tiempo. Al fin y al cabo llevas desde siempre con él o detrás de él y ya va siendo hora de parar, aunque sólo sea para tomar un respiro,organizar tus ideas y poder volver después más fuerte que nunca.

Te vas a dedicar a ti mismo. Sí, está decidido.

Unos meses después todo va según el plan, todo está bien, y sientes que no necesitas nada más. Hasta que…

Hasta que la vida te busca con forma de mujer.
Sangre italiana y española con acento francés.
Te mira a los ojos y vuelves a ver.
Y entonces la miras y no te lo crees.

Te regala su tiempo, su presencia, sus momentos.
Le robas un beso y otro más después.
La abrazas, te despides, te vas tan contento…
Y entonces lo piensas y no te lo crees.

Vibras cuando te sonríe y cuando te roza.
Te cuenta, pregunta, te escucha y lo ves:
despierta tus sentidos y te alboroza.
Sabes que es real, pero tú aún no lo crees.

No quieres prendarte, sabes que se acaba.
El tiempo se escurre, ya casi se fue…
Tú quieres saber que es lo que pasaba
así que al final le preguntas por qué.

¿Por qué existes? ¿Por qué me miras? ¿Por qué me eliges a mi?
¿Por qué me abrazas? ¿Por qué me buscas? ¿Por qué yo de entre cien mil?

Su respuesta es tan humana, tan real, tan sincera…
Y a la vez tan bonita, profunda y soñadora…
Que ya no lo eliges, no decides, ya no esperas.
Solo te dejas llevar, ya solo te enamoras.

Et dès que je l’aperçois alors je sens en moi mon coeur qui bat

Deja un comentario